Mac-Conciertos
Ya hace unos años las grandes bandas o intérpretes consagrados, una vez se consideraban parte de un firmamento que muchas veces les impedía ver su propia falta de talento, se hacían acompañar de orquestas sinfónicas o corales en auditorios emblemáticos como el Teatro Nacional, Palau de la Música (minuto de silencio, por favor) o el Covent Garden. Luego, con la irrupción de corrientes y tendencias mucho más minimalistas, cualquier banda que se preciara debía tener su concierto acústico o unplugged. Pero ahora la tendencia definitiva son los que personalmente denomino como “mac-conciertos”.
Todo surgió de una discusión festivalera entre amigos a lo largo de la pasada edición del Primavera Sound, donde pudimos verificar que ya definitivamente se ha impuesto un nuevo instrumento en la práctica totalidad de bandas, “el Mac”. Evidentemente siempre estamos hablando de bandas de música pop rock, llamémosle convencional (no estrictamente electrónica, vamos), y que, pese a contar todas ellas con samples o arreglos electrónicos, basan su música en instrumentos habituales o (si me lo permiten) tradicionales como la guitarra, bajo, batería, teclados…
Bueno, pues decir que en buena parte de los mismos aparecía, y en muchas ocasiones en un lugar preferente destacando con su logo de manzanita brillante, un portátil Mac. Hasta ahí todo bien, está claro que desde ya hace mucho tiempo la música se apoya en la electrónica y los intérpretes deben tener lo más a mano posible el portátil que les permita incorporar los arreglos, samples, reiteraciones, efectos o lo que sea. De todas formas a mí ya me asalta la duda en algunos casos de si estoy acudiendo a una actuación con música en vivo, a un recital playback o a una sesión Dj con escenografía en directo.
Esta misma semana volví a tratar el tema con mi amigo Marc, tras un mini recital en un pequeño local en l’Eixample que, dada la actual normativa municipal, podríamos calificar de casi semi-clandestino y en el que Lucrecia (por cierto recomiendo su nuevo disco “Congost”, autoeditado y autoproducido con no poca calidad y seguro que mucho esfuerzo). Esta joven intérprete colombiana, nos brindó un recital íntimo, acompañada de una guitarra eléctrica, unas esporádicas pinceladas de un acompañante percusionista y, evidentemente, el inevitable Mac. Pues en este caso, la chica acentuando su estudiada pose tímida y frágil para acompañar su propuesta musical de delicada “envolvencia” acústica, en algunos temas ni siquiera se esforzaba en aparentar que cantaba o tocaba instrumento alguno, dedicándose a arreglar y recoger los instrumentos que aparentemente le acompañaban, mientras la música –con su voz incluida- continuaba sin apreciarse ninguna inflexión en el tema. Como he dicho nada o poco a reprochar sobre su propuesta musical que, personalmente, me parece muy interesante e invito a conocer. De todas formas, nuevamente sí que me suscitó la duda, compartida por mi compañero, sobre si efectivamente habíamos asistido a un recital en directo o no.
Hablándolo luego con Rul, nuestro webmaster, que siempre tiene tendencia a mostrarse algo más condescendiente con el artista, me recalcaba con acierto que ese Mac, entre otras muchas, es una herramienta imprescindible para alguien que empieza; y que, por tanto, no dispone de los recursos necesarios para hacerse acompañar por un violinista, pianista, … y que lo utilizas para incorporar determinados detalles trabajados a fondo en su estudio (que generalmente coincidirá con su propia casa) y así darle la complejidad que desea a su música. Hasta ahí, hasta podría estar de acuerdo, pero es que, como indicaba antes, esta sensación de estar en un playback o en una sesión dj grabada, también se daba en alguno de los recitales de uno de los principales festivales de esta ciudad, como es el Primavera Sound; y en bandas que en principio tienen una propuesta musical mucho más alejada del entorno electrónico.
Ante todo esto, me gustaría plantearles algunas de las diversas reflexiones a las que estoy alcanzando con este tema y del que me gustaría oir sus opiniones:
– ¿Tenemos que empezar a cambiar el nombre de concierto cuando acudimos a un recital de pretendida música en directo, por el de espectáculo teatral musicalizado?
Personalmente me encanta que los grupos en sus directos cuiden mucho la escenografía, pero es que en este caso debería ser un mínimo exigible.
– ¿Qué diferencia hay entre una sesión de un dj, con un mac-concierto?
– ¿Qué diferencias hay entre un playback y un mac-concierto?
Fdo. El Lobo Estepario